martes, abril 26, 2011

Prepararse para la pérdida

 

    Queramos o no, tarde o temprano las perdidas llegarán a nuestra vida. los duelos, el dolor por alguien que falta. Pero mientras tanto, parece algo absurdo enfrentarse a algo que no queremos aceptar, que nuestros queridos, algún día nos dejaran. No aceptamos lo cambiante de nuestra existencia. No vemos que cada día, cada minuto, perdemos algo 2011-01-04 18.12.54y no pasa casi nada. Tenemos cambios a lo largo de nuestra vida. Muchos de ellos son para mejor. Cambiamos de coche, de casa, de teléfono, y experimentamos un pequeño, o mediano, sentimiento de pérdida, de duelo, aunque el nuevo sea mucho mejor. Esto sucede a lo largo de toda nuestra vida, y nos ayuda a prepararnos para pérdidas mayores. Pero en ocasiones, la vida nos sorprende y nos presenta un duelo tamaño extra e inesperado, quizá antes de que estemos a medio entrenamiento. 

     Por esto os propongo que ayudemos a nuestro cerebro a aceptar la pérdida, el cambio, a verlo como algo inherente a nuestra existencia, y no como algo por lo que no podemos pasar. Sin duda alguna el ser humano está preparado para el cambio, tiene recursos para afrontarlo incluso aunque al principio sean superiores a lo esperado o previsto. En esta disposición para el cambio está la raíz de la supervivencia de nuestra especie frente a todas las inclemencias del tiempo, en todos los continentes y condiciones por muy extremas que fueran.

     Negarnos a admitir cambios es ir en contra de nuestra naturaleza, adaptativa y superviviente. Con más o menos esfuerzo, al final no nos queda otra que seguir hacia adelante. Nuestro cuerpo y mente están preparados para sobrevivir, lo contrario significa la aniquilación de nuestra especie.

     Decía un proverbio chino que si te caes siete veces, debes levantarte ocho.